Según se reporta Robert Lyons -quien padece trastorno bipolar- se enfureció con su madre por la causa mencionada y comenzó una acalorada discusión en la cual la señora supuestamente lo amenazó con un cuchillo. Sin embargo haciendo él uso de su fuerza victimó a su madre de 61 años, y todo por no obtener los tickets premium que él tanto deseaba.
Detengámonos un momento y reflexionemos: ¿se dan cuenta hasta donde puede llegar una persona débil mentalmente debido al fanatismo? ¿No les recuerda esto en parte a las niñas desmayadas y llorando al agotarse los tickets para los conciertos de tal o cual producto pop? ¿Qué es capaz de hacer alguien con nula inteligencia emocional con tal de estar cerca de su ídolo?
Avril Lavigne seguramente no estará feliz con esta historia. El juicio comenzó el miércoles y la abogada estatal Ann Celine O'Hallaren explica que el hombre no tuvo piedad al apuñalar a su madre en repetidas ocasiones. Sin embargo la defensa de este individuo afirma que la señora lo amenazó primero y que él "no planeaba matarla y no era su intención". Por lo que vemos la defensa tiene un argumento bastante pobre ¿no lo creen?
Igualmente terrible es el hecho que Lyons fue arrestado mientras estaba de parranda en un restaurante Hooters luego de haber estado de shooping en diferentes lugares. No cabe duda que su estado mental habla por sí solo.
Piensen un poco y tal vez muchos lectores digan: "sí, es que él es bipolar". Pero ante los recientes despliegues de fanatismo que hemos visto en los medios ¿vale realmente la pena desgastarse, llorar y hasta subastar lo más valioso por un boleto para un concierto?
Trátese de Avril Lavigne o del artista que sea la respuesta es... nunca. La música y el arte pop está hecho para divertirnos ¡no para enloquecernos!...
0 comentarios:
Publicar un comentario